Una buena investigación de mercados es una herramienta que hace mejorar productos, servicios e incluso nuevas estrategias e ideas para su desarrollo.
Sin embargo, hay una serie de mitos sobre la investigación de mercados que obstaculizan el poder llegar a tener una prospección de mercados audaz y útil, sobre todo en una era digital en la que las audiencias son bastante más difíciles de identificar y, sin duda, mucho más sofisticadas a la hora de analizar comportamientos y hábitos de consumo. Es necesario conocer bien estos mitos para poder desecharlos y realizar una buena investigación de mercados.
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Cuáles son los falsos mitos que debemos tirar por la borda
1-Los estudios de mercado resultan muy caros para lo que pueden aportar a la empresa que los contrata.
Si bien es cierto que un estudio de mercado es caro por la cualificación de los profesionales que lo elaboran, por el trabajo y las técnicas de extracción de datos que conlleva, en los últimos tiempos hay bastantes opciones digitales que se pueden adaptar a todos los bolsillos, desde encuestas en redes sociales tales como Facebook, Instagram o Twitter, que se pueden elaborar con costes más que económicos, hasta plataformas de correo electrónico que también son muy efectivas para crear una buena base de datos y que no tienen por qué costar una auténtica fortuna.
2-La elaboración de una investigación de mercado lleva mucho tiempo
Puede ser que sí, que una investigación de mercado laboriosa lleve mucho tiempo, pero no es así en todos los casos. Hacemos de nuevo hincapié en la era digital en la que vivimos.
Recabar datos es, a día de hoy, más fácil y rápido que nunca, quizás lo que lleve más tiempo es contrastarlos, obviamente, pero tenerlos, a través de correos electrónicos y redes sociales no es tan costoso ni tan difícil. Muchas empresas recurren a ellos con muy buenos resultados.
3-La empresa conoce perfectamente a su público, no es necesario recurrir a una prospección de mercados.
Aunque es posible que la mayoría de las compañías conozcan a su público consumidor y piensen que no necesitan un estudio de mercado, en un momento determinado éste puede ser también un falso mito.
Las necesidades, hábitos de consumo, preferencias, gustos, incluso los cambios de comportamiento y selección de otro producto y servicio de la competencia pueden ocurrir y pillarnos desprevenidos.
En los tiempos que corren, la competencia es muy dura, la variedad en la elección es cada vez mayor y más sofisticada, y los hábitos de consumo crecen y cambian a ritmos bastante acelerados.
Hay que conocer esos cambios en las preferencias del consumidor final, y para eso, es muy necesario elaborar un buen estudio de mercado que ayude a identificarlas y a actuar en consecuencia.
4-Obtener datos es muy fácil, no hace falta contratar una investigación de mercado.
Nada más lejos de la realidad, y más en la actualidad, con la sofisticación del mundo virtual, en el que todo el mundo está presente, de alguna u otra manera (redes, correos electrónicos) y desde luego, hay que ser más selectivos a la hora de identificar tanta información.
Obtener información de forma digital puede parecer fácil, pero no lo es. Los profesionales del marketing deben esforzarse, cada vez más, por obtener un público objetivo fiable, analizar respuestas y franjas socio demográficas, perfiles de consumidor, etc., porque la amplitud es inmensa, y por lo tanto, difícil de acotar.
5-Con una investigación sería más que suficiente
Muchas empresas consideran que con una buena investigación de mercado en un periodo de tiempo razonable, y que ésta no quede obsoleta, sería más que suficiente.
Pero en ocasiones, no es así, puesto que la realidad es que los consumidores tienen cambios constantes en sus comportamientos, máxime cuando hay tanto donde elegir, y resulta muy, pero que muy difícil llegar al consumidor final y que éste se fije en nuestro producto o servicio.
Conviene, pues, estar al día, analizar los cambios en los usos y costumbres, analizar tendencias, y si es necesario, que posiblemente lo sea, y más en el mundo digital, contratar una investigación de mercado que sea continúa.
Esto significa, entre otras cosas, en no pararse en la investigación de mercado hasta que llega el momento del lanzamiento del producto, sino en ver cómo ha funcionado el lanzamiento, y cuál es el grado de satisfacción del cliente.
6-Las empresas de investigación de mercado son todas iguales
A la hora de contratar una empresa externa para realizar una investigación de mercados, hay que tener en cuenta que no todas las empresas son iguales o se dedican a lo mismo, o tienen las metodologías exactamente iguales. La diversificación de este negocio es grande, hay que conocerla, aunque sea por encima.
No es lo mismo investigar el éxito o fracaso de un programa de televisión, que la penetración en el mercado de un nuevo medicamento. Ni el público será el mismo, ni tampoco las encuestas a elaborar, puesto que algunas van dirigidas a profesionales muy cualificados, con preguntas muy precisas (en el segundo caso) y otras pueden ir dirigidas al público en general.
7-Si ya tenemos acceso a datos públicos, para qué hacer un estudio de mercado
Cualquier empresa de la competencia tiene exactamente el mismo acceso a datos públicos, estadísticas y estudios libremente publicados en Internet, tesinas, balances de empresa, etc.
Éste es precisamente uno de los falsos mitos más evidentes. Encontrar el dato adecuado, la respuesta precisa, identificar necesidades y nuevas tendencias contando con datos públicos puede ser un laberinto y un maremágnum de información que no llevará a ninguna empresa a buen puerto.
8-Cuanto más completa, grande y extensa sea la encuesta, mucho mejor para realizar el estudio de mercado
En el mundo digital de hoy en día, es preferible realizar encuestas cortas y precisas, teniendo en cuenta que muchas de ellas se realizan online, mediante encuestas de panelistas, y muchas de ellas a dispositivos móviles.
Los encuestados pueden llegar a cansarse y a no concentrarse cuando han transcurrido más de 15 minutos preguntando una y otra vez sobre lo mismo de distinta manera.
Incluso muchos se dan de baja por cansancio. Preguntas concretas, sencillas, y con una duración que no avasalle al encuestado, en un mundo en el que nadie quiere ni debe perder su tiempo, será siempre la mejor opción.
9-Es mucho más importante la investigación en persona que la investigación online
Depende de los resultados que queramos obtener, no siempre una investigación en persona es la más eficaz. La investigación cuantitativa online es una metodología muy eficaz, además, el coste es más bajo que una investigación cualitativa o en persona, y tiene muchas ventajas, por ejemplo, permite a los profesionales recabar opiniones en un mercado mucho más amplio, además, si una investigación cuantitativa cumple con las expectativas de la empresa, siempre será más económica.
10-Es mucho más importante una investigación cuantitativa que cualitativa
Como en el caso anterior, depende del tipo de estudio de mercado que la compañía necesite realizar. Muchas veces, la empresa tan sólo quiere saber cuál es el perfil del consumidor con datos cuantitativos, cuánto compra, cuántos servicios consume, con qué periodicidad, etc. Pero hay veces que es necesario hacer preguntas abiertas y entrevistas más al detalle para saber algo fundamental: el por qué de la elección del consumidor final.
La toma de decisiones sobre lanzamientos o mejoras de productos que están dejando de funcionar, se basan en investigaciones de tipo cualitativo. Luego, según qué casos, ambas serán importantes y se puede escoger entre una u otra, o ambas, en función de las necesidades de la empresa.
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