Un estudio transversal es un tipo de investigación de mercados en el que se re recogen datos en un determinado periodo de tiempo, sobre una muestra de una población.
En este caso, las personas incluidas en el estudio son similares en todas sus características (edad, sexo, educación, procedencia geográfica), salvo en aquella variable que se está estudiando, que permanece constante durante todo el curso del estudio.
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En qué consiste un estudio transversal, su mecánica de desarrollo y tipos
Al estudio transversal se le denomina en ocasiones “instantánea”, como la instantánea de una fotografía que ha captado un momento determinado, que no se volverá a repetir, que es única. A través de una determinada muestra de la población, se estudia una variable mediante un único contacto, una encuesta, una opinión o un cuestionario.
Esta variable es única y no cambia a lo largo del estudio, mientras que la muestra encuestada tiene las mismas características en cuanto a cualidades demográficas se refiere: edad, sexo, procedencia geográfica, etc.
Al tratarse de estudios muy puntuales, además de no excesivamente caros, las empresas de ventas, las de negocios, las de servicios, educación o salud, las llevan a cabo con éxito para verificar asuntos muy concretos y en un espacio de tiempo muy determinado.
Por ejemplo, en una empresa de ventas, un estudio transversal con una muestra de hombres y mujeres de entre 20 y 35 años, podría darle a la compañía un dato muy exacto sobre el gasto que estas personas están realizando a la hora de comprar sus productos.
Este tipo de estudios ayudan a recabar una gran cantidad de datos, y al ser “instantáneas” de un momento puntual, las estrategias posteriores son rápidas en lo que se refiere a la toma de decisiones de cualquier empresa u organismo, en su oferta de bienes, productos y servicios.
Tipos de estudios transversales
Los estudios pueden ser descriptivos (sirven para evaluar la frecuencia de un tipo de estudio, por ejemplo, analizar los centros de salud de una zona para constatar cuántos diabéticos reciben tratamiento); o bien analíticos (analiza la asociación entre dos parámetros que pueden estar relacionados o no, por ejemplo, si en un puesto de trabajo de despacho se pueden desarrollar con más facilidad pequeñas lesiones de espalda, aunque el estudio no explicará si éstas podrían venir de antes, por lo que esta metodología, para los expertos, no resulta del todo completa).
Para las empresas de productos y servicios, es un estudio muy útil porque se pueden recopilar gran cantidad de datos sobre una cuestión en particular, por ejemplo, datos que indiquen cuáles han sido los hábitos de consumo de esa muestra de la población en el pasado, y cuál es el hábito real de consumo en la actualidad.
Los estudios transversales son muy útiles porque se pueden recabar gran cantidad de datos, además, estos datos pueden ser útiles para otros parámetros que se quieran investigar, ya que investigan, principalmente, la frecuencia de algún hábito en una población determinada. Además, pueden servir como punto de partida para llevar a cabo otra serie de investigaciones.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que al ser “instantáneas” de un momento determinado, no se pueden utilizar para investigar en una línea más larga de tiempo.
Además, es difícil encontrar una muestra de población sujeta a las mismas variables, y tan sólo recaba datos, pero no ayudan a determinar la causa de un comportamiento, de un hábito, el por qué, y tampoco ayudan a evaluar el efecto. Básicamente, un estudio transversal valora la frecuencia de alguna acción: acción de compra, de consumo, la aparición de determinadas dolencias, etc.
